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Lowell Brueckner

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Superior al sumo sacerdote

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 Un estudio expositivo en el libro de Hebreos

Capítulo 5

     1.      Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios se refiere, para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados;

     2.      para que se muestre paciente con los ignorantes y extraviados, puesto que él mismo está rodeado de debilidad;

     3.      y por causa de ella debe ofrecer por los pecados, tanto por sí mismo como también por el pueblo.

4.      Y nadie toma para sí esta honra, sino el que es llamado por Dios, como lo fue Aarón.

 

Qué es el sumo sacerdocio

En los primeros cuatro versículos, el escritor define en qué consiste el oficio del sumo sacerdote. Aunque los cristianos judíos lo conocían bien, él tiene que recordarles sus principios básicos. La naturaleza humana tiende a ocuparse en los detalles superficiales que rodean lo que Dios nos ha dado, y a olvidarse del propósito mayor, por el cual Él lo ha designado. Ahora, nosotros, que no estamos tan familiarizados con el sacerdocio judío, podemos aprender y aprovechar de sus escritos.

 La primera cosa que tenemos que considerar es que Dios eligió al sumo sacerdote de entre sus semejantes. Para cumplir los propósitos de su posición, él tiene que tener cualidades interiores que le capaciten para su ministerio. Al ser miembro de la raza humana, él puede entender las pruebas interiores y el sufrimiento de aquellos a quienes sirve; si no tiene compasión pierde la efectividad de su ministerio. Es una gran lección para todos los que son líderes en la iglesia. Si uno, simplemente, asume los deberes y responsabilidades relacionados con su tarea, pierde el significado totalmente. Él tiene que ser preparado en el corazón antes de poder entrar en el ministerio cristiano.

Un reposo superior al sábado

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Un estudio expositivo del libro de Hebreos

 

                         Capítulo 4

     1.  Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.  

          2.    Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.

  3.     Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo: Por tanto, juré en mi ira, no entrarán en mi reposo; aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo.

4.      Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día.

5.      Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo.

6.      Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia,

7.      otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo: Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones.

8.      Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día.

9.      Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios.

10.  Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.

11.  Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.