A. B. Simpson... La Fe
A. B. Simpson |
Quisiera
compartir con vosotros un pensamiento importante sobre la fe, escrito por A. B.
Simpson, el fundador de la Alianza Cristiana y Misionera. Verás que la verdadera
fe no le viene de forma natural a nadie: es un don de Dios. A veces se llama la fe salvadora. Los discípulos pidieron
a Jesús una fe incrementada… “Auméntanos
la fe”, dijeron, demostrando así un error en sus pensamientos. Pensaban que
lo que les faltaba era tener más fe humana, pero Jesús, inmediatamente, les
corrigió, enseñándoles acerca de una fe DIFERENTE… una fe que es como un grano
de mostaza. En cierta ocasión, les dijo: “¡Tened
la fe de Dios!” (traducido más correctamente) (Marcos 11:22).
Pablo dijo
a los gálatas: “Ya no vivo yo, sino que
Cristo vive en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe DEL Hijo
de Dios…” (Gá. 2:20). Yo pongo mucho énfasis en el hecho de que Cristo vive
en nosotros para que, por medio de nosotros, Él demuestre Su amor (Jn.17:26),
Su gozo (Jn.15:11), Su paz (Jn.14:27) y, como vemos ahora, Su fe; es así como
podemos ser testigos y dar testimonio de Cristo. Ser salvo y ser un verdadero
cristiano no es nada menos que tener a Cristo personalmente viviendo en nosotros.
“El que tiene al Hijo, tiene la vida” (1Jn.
5:12)… Él tiene Su vida y Su vida es
la vida eterna. Esta es la salvación y la esperanza de ver y estar en la Gloria
de Dios: “A quienes quiso Dios dar a
conocer cuál es la riqueza de la gloria de este misterio entre los gentiles,
que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria” (Col.1:27).
Hemos oído,
erróneamente enseñado y sin ninguna base bíblica, por algunos que son
ignorantes de lo que es la fe verdadera, que la fe no nos será útil y terminará
cuando vayamos al cielo y veamos a Cristo cara a cara. No, Pablo dice que la fe
permanecerá junto a la esperanza y el amor, cuando las profecías, las lenguas y
el conocimiento terminen. En ninguna parte dice que la fe dejará de existir.
Sólo los hombres que razonan según la lógica humana llegan a tales
conclusiones. Pablo enseña que la fe tiene su origen en el Espíritu Santo y es
manifestada como fruto o don del Espíritu en nuestras vidas… ¡NO es nuestra! Si
la fe es un atributo de Dios, ¿cómo podrá no permanecer en la eternidad? Aquí
presento lo que dijo A. B. Simpson…
“La fe es una fuerza
espiritual y actual. Sin duda es uno de
los atributos de Dios mismo. La encontramos manifestada en todos los
milagros de Jesús. Él explica a Sus discípulos que secó una higuera por el
poder de la fe y que, por ese mismo poder, ellos podrían vencer y quitar los
obstáculos más grandes de su camino (Mt.21:19-21). No cabe duda de que cuando
el alma, por el poder de Dios, ejercita la fe, mandando como Dios manda,
entonces, una fuerza potente opera en ese momento contra el obstáculo; una
fuerza igual de auténtica que la eléctrica o la de la dinamita. Dios ha puesto
en nuestras manos uno de Sus propios
instrumentos de omnipotencia y nos permite usarlo en el nombre de Jesús según Su voluntad y para establecer Su
reino”.
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