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Lowell Brueckner

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Falsos Testigos

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El amor a la verdad

Charles Russell
¿Qué tan importante es la verdad? ¿Qué tan importante nos es amar a la verdad? No puedo imaginar algo que sea más importante. El opuesto de la verdad es la falsedad y la falsedad anula cada cosa buena. El gozo, la paz, la humildad, la justicia, y los demás virtudes en el mundo tienen sus falsificaciones. Aún el amor, si le falta la verdad, cambia en un amor fingido y probablemente es la cosa más engañosa de todo el espectro de la mentira.

El amor es fundamental para el cristianismo al punto que la persona que no anda en amor, según el apóstol Juan, “no ha conocido a Dios; porque Dios es amor” (1 Jn.4:8). El apóstol Pablo clasifica el amor sobre todos los dones y virtudes: “Ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor” (1 Co.13:13). Porque es así y porque el padre de mentiras entiende su poder, él viene disimulando el amor y hoy millones de personas son engañados… ¡en el nombre del amor!

Pablo llama la verdad el ceñidor de la armadura de Dios (Ef.6:14), porque junta la armadura entera y sin ello, todo se desarma rápidamente. La verdad se mantiene solo y por la virtud de su propio nombre, no puede engañar. La verdad reina eternamente. Cristo proclamó, “Yo soy la verdad”, y por eso todos que vienen a Él, tienen que enfrentar a la verdad: “El que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios” (Jn.3:21).

Considera cuidadosamente el aviso siguiente de Pablo a los Tesalonicenses y verás que ¡Dios valora y ama a la verdad más que ama a los hombres! “Se manifieste el hombre de pecado… cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad…” (2 Tes.2:3-12).



Aquí presentamos un aviso a la iglesia desde el Siglo XIX por los escritos del obispo muy respetado, J. C. Ryle. Comenta sobre el enfrentamiento que Pablo tuvo con Pedro: ¡Pablo, el más joven, reprende a Pedro, el mayor!... el apóstol Pablo dice: ‘Le resistí cara a cara, porque era de condenar’. Hace más que eso: reprende a Pedro públicamente por su error ante toda la iglesia en Antioquía. Va más lejos aún: hace constar el hecho de tal forma que ahora se lee en doscientos idiomas (mucho más en el siglo 21) por todo el mundo… ¿Por qué lo hizo Pablo? Porque temía la falsa doctrina… porque quería enseñarnos que debemos contender por ella celosamente y temer más la pérdida de la Verdad que la pérdida de la Paz… Muchas personas aceptarán cualquier cosa en la religión con tal de tener una vida tranquila. Tienen un temor enfermizo a lo que denominan ‘controversia’”.

Por amor a la iglesia, como acabamos de ver por el obispo Ryle, el deber apropiado de los hombres de Dios es avisar a la iglesia de cualquier alejamiento de la verdad que la iglesia ha profesada históricamente. Por esa razón, aunque puedan estar muy críticos de la condición actual de la iglesia, temiendo una caída a la apostasía, los que aman a la iglesia nunca negarían sus raíces históricas. Esta posición es muy diferente de aquella que fue la de los fundadores de las tres sectas que estamos estudiando. Estos charlatanes arrogantes no veían el valor de la historia de la iglesia y daban la espalda a sus doctrinas más esenciales. Ellos sentían que Dios les había levantado para revelar “nuevas verdades” jamás entendidas en el pasado. De hecho, ellos aborrecieron a la iglesia establecida y también aborrecieron la verdad que siempre fue apoyada por todos los elementos evangélicos. Seguramente este fue el punto de vista de Joseph Smith, fundador de los mormones, William Miller y Ellen White, los líderes del movimiento adventista, y Charles Russell, el fundador de los Testigos de Jehová.

Charles Taze Russell

Charles Russell, nacido en el 16 de febrero, 1851, en Allegheny, Pennsylvania, fue el fundador del movimiento Estudiantes de la Biblia, de donde emergieron Los Testigos de Jehová. Siendo niño, su familia fue presbiteriana, pero a la edad de 13, él mismo abandonó a los presbiterianos y se juntó con los congregacionalistas. En aquellos tiempos fue un defensor del “infierno de fuego” y garabateaba textos de la Biblia, sobre el tema, en los postes de las vallas en su pueblo. A la edad de 16 empezaba a cuestionar su fe e investigaba varias otras religiones, buscando alumbramiento. No encontró satisfacción. Russell se casó en 1879 y fue divorciado en 1908, habiendo separado de su esposa en 1897.

Charles Russell asistía a las reuniones de los adventistas en 1870, y después se asoció con un grupo influido por los adventistas milleristas. Ellos llegaron a la conclusión que muchas de las doctrinas más importantes de las iglesias establecidas no fueron bíblicas, incluso las doctrinas sobre la trinidad, el infierno de fuego, y la inmortalidad del alma.

Él presentó sus puntos de vista a los líderes de las iglesias y fue rechazado. Con su padre había estado en el negocio de tiendas de ropa y ahora vendió sus cinco tiendas por $300.000 (valor actual. ¡$6.644.000!) e invirtió el dinero en su propio “ministerio”. Fundó Zion´s Watch Tower Tract Society, después cambió el nombre a Watch Tower and Tract Society y eventualmente lo estableció en Brooklyn, New York.

Nuevo centro de mando para los Testigos falsos
Él creyó que su obligación fuera juntar todos aquellos que “buscaban la verdad de la palabra de Dios.” Escribió que “el desarrollo de la clara verdad”, contenido en sus enseñanzas se debió “al hecho sencillo que ha llegado el tiempo debido de Dios, y si yo no hablo, y ningún otro agente puede ser hallado, entonces clamarán las mismas piedras”. Después bajo la dulce influencia del éxito, fue tan lejos como para aceptar la aseveración que él mismo fue el “siervo fiel y prudente” personificado que se presenta en Mateo 24:45.

Los periódicos, con un número de 15 millones de lectores en los Estados Unidos y Canadá empezaron a publicar sus sermones, y fueron distribuidos hasta llegar a 4.000 periódicos en todo el mundo. ¡Sus obras se clasificaron en tercer lugar entre las más circuladas en todo el mundo, excediendo la circulación de todos los escritos de los sacerdotes y predicadores combinados en Norte América! Produjo una película de ocho horas, dividida en cuatro partes, “La drama fotográfica de la creación”, que fue la primera que sincronizó una película con el sonido.

Durante el proceso judicial de su separación legal de su esposa in 1906, el abogado de la Sra. de Russell alegó que su marido tuvo “intimidad inapropiada” con una “hija de acogida”. También él tenía enemigos entre sus asociados que le acusaron de liderazgo dictatorío y prácticas de negocio pocas éticas.

Los testigos de Jehová 

Joseph Rutherford
Después de la muerte de Russell en 1916, Joseph Rutherford fue el presidente de The Watchtower Society. Había mucha controversia entre los miembros en ese tiempo y los seguidores se dividieron en varios grupos. Los que se mantuvieron leales a Rutherford ahora se llaman los Testigos de Jehová.

Hoy en día la secta tiene 8.2 millones de miembros y es gobernada por una jerarquía de ancianos en Brooklyn, New York. Ellos establecen todas las posiciones doctrinales basadas sobre sus propias interpretaciones de la Biblia. Los Testigos de Jehová  han publicado su propia Biblia, llamada el New World Translation of the Holy Scriptures (La Traducción de las Sagradas Escrituras del Nuevo Mundo).

Como fue el caso con los mormones y los adventistas, las doctrinas de los testigos han estado evolucionando sobre los años, lo que lo hace difícil determinarlas exactamente. Como es el caso con las otras sectas también, sus modificaciones doctrinales son acompañadas con “destellos de luz” y “visitaciones invisibles de ángeles”. Típicos de los grupos inestables, las manifestaciones sensacionales más allá de las Escrituras siempre son necesarias para autenticar sus aserciones cuestionables. Los sucesores de Russell, Joseph Rutherford y Nathan Knorr, han cambiado varias creencias que mantenía Russell y otros puntos de vista continúan siendo cambiados tras puertas cerradas por el Cuerpo Gubernamental.

Obviamente les es imposible asegurar cualquier concepción de la verdad eterna que el pueblo de Dios ha mantenido sobre los siglos por la autoridad de la Biblia. Cierta literatura Watchtower que antes garantizaba ser “indisputable”, “absolutamente e incondicionalmente correcto”, “manteniendo ‘el sello de la aprobación de Dios Omnipotente’”, ahora es determinada falible y no inspirada divinamente por el Cuerpo Gubernamental.  ¡Que inestable son las mentiras del diablo! ¡Que crédulos son los miembros que mantienen una confianza leal, creyendo que el gobierno del reino de Dios sobre la tierra habita en las grandes edificios, ahora localizados en Warwick, New Jersey, U.S.A.! Todos los miembros tienen que sujetarse a sus leyes y decisiones.

Los testigos se alejan más de las enseñanzas históricas de los cristianos por sus doctrinas que los adventistas, especialmente en negar la trina deidad y por eso, yo les considero la menos peligrosa de las dos sectas. Lo digo porque lo más que la falsificación aparente al  auténtico, lo más difícil es detectar su falsedad. De todos modos, el hecho que 8.2 millones de gentes han caído en su trampa, demuestra que los testigos son una herramienta poderosísima de Satanás para destruir las almas de los hombres.  


Los Testigos de Jehová creen que la iglesia apartó de la fe en el primer siglo. En otras palabras, al morir los apóstoles, las doctrinas más importantes, mantenidas por la iglesia desde entonces, son todas cuestionables. Creen que ellos son el único grupo que se ha levantado para restaurar la fe apostólica. Ahora vamos a resumir estas posiciones doctrinales, como lo hicimos con los adventistas. Hallarás similitudes, debido a la asociación entre los dos movimientos en sus comienzos. Pues aquí están algunas de sus más importantes creencias:

Distinto a los adventistas, los testigos de Jehová no son trinitarios. Jehová es el nombre apropiado de Dios y el propósito y deber principal para ellos es llevar testimonio a ese nombre. Dios no escuchará la oración dirigida a cualquier otro nombre. Esta es una doctrina muy importante para ellos y la necesitan para establecer su identidad y justificar su razón porque existir. Dios, entonces, es uno en número y personalidad, y su nombre es Jehová. Es un intento de simplificar la doctrina de Dios para que sea concebible en la mente limitada de la humanidad.

Por negar a la trinidad, también tienen que negar la divinidad de Cristo. Su Cristo es algo menos que el Hijo eterno de Dios. Por ellos, es llamado “un dios”, definido como “un ser poderoso”. Jesús es Miguel, el arcángel, y era la primera creación de Dios. El arcángel, al venir al mundo, fue hecho un hombre perfecto y nada más. Jesús no murió en una cruz, sino sobre una estaca. No resucitó físicamente de la tumba. Ellos razonan que para ser un sacrificio real, el cuerpo de Cristo tuviera que quedarse en el sepulcro. Entonces lo que vieron los discípulos fue un cuerpo espiritual (¿?).

También porque niegan a la trinidad, por eso su espíritu santo no es una persona; no vive, sino que es una fuerza activa, algo semejante al radar u ondas de radio.

Según los testigos solamente existen 144.000 que han nacido de nuevo, son salvados y seguros en el cielo. Lo mejor que puedan esperar los demás es un paraíso en la tierra. Ellos dicen que por estudiar a las Escrituras, llegan a creer en Jesucristo y están en el camino hacia la salvación. Todos tienen que demostrar su fe por medio de sus obras. Es un error para ellos tener una seguridad que ya, en tiempo presente, han entrado en la vida eterna. Cada uno tiene que demostrarse digno de la salvación. Solamente hay salvación por medio de su iglesia que es el canal de la verdad de Dios.

Por una doctrina prestada de los adventistas, los testigos creen que el alma es inconsciente después de la muerte y en ese estado espera a la resurrección.

Salón para reuniones típico para los Testigos
No hay un castigo eterno para los incrédulos. El infierno es la tumba. Gehena, el Lago de Fuego, es el lugar de la aniquilación. Creen que el castigo eterno sería contrario a la naturaleza de Dios, quien es amor.

Cristo empezó su reino sobre el mundo en 1914 y 1914 también marca el establecimiento del Reino de Dios en el cielo. Es cuando terminó el Tiempo de los Gentiles.

Apenas vamos empezando destapar el espectro completo de la locura doctrinal de Watchtower. Lo que he escrito aquí debe ser evidencia suficiente para comprobar que el sistema de creencias de los testigos ha sido diseñado en el infierno. Esta es una organización que destruye una relación individual con Dios y no permite cualquier desviación de las decisiones hechos en el centro de mando de Watchtower. Es una esclavitud espiritual en su peor forma.


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