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24 – 30 de mayo Meditaciones diarias de los Salmos
24 de Mayo Salmo 42
1. Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas,
así clama por ti, oh Dios,
el alma mía.
2. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿Cuándo
vendré, y me presentaré
delante de
Dios?
3. Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras
me dicen todos los
días: ¿Dónde
está tu Dios?
4. Me acuerdo de estas cosas, y derramo mi alma dentro de
mí; de cómo yo fui
con la
multitud, y la conduje hasta la casa de Dios, entre voces de alegría y de
alabanza del
pueblo en fiesta.
5. ¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de
mí? Espera en Dios
porque aún he
de alabarle, Salvación mía y Dios mío.
6. Dios mío, mi alma está abatida en mí; me acordaré, por
tanto, de ti desde la
tierra del
Jordán, y de los hermonitas, desde el monte de Mizar.
7. Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas; todas
tus ondas y tus olas
han pasado sobre
mí.
8. Pero de día mandará Jehová su misericordia, y de noche
su cántico estará
conmigo, y mi
oración al Dios de mi vida.
9. Diré a Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí?
¿por qué andaré yo
enlutado por la
opresión del enemigo?
10. Como quien hiere mis huesos, mis enemigos me
afrentan, diciéndome cada
día: ¿Dónde
está tu Dios?
11. ¿Por qué te abates, oh alma mía, y por qué te turbas
dentro de mí? Espera en
Dios; porque
aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío.
¡Danos, oh Señor,
la bendición de un alma sedienta por una manifestación del
Cristo resucitado! No estamos rogando para que Cristo
descienda a nosotros,
sino para que nuestros espíritus sean levantados a Su
presencia, donde podremos
contemplarle. Nuestra parte es ignorar otras corrientes
que ofrecen saciar nuestra
sed, y desear satisfacernos solamente con el Dios
viviente. Si tenemos en nuestra
memoria días de bendición, estos recuerdos nos animarán a
suplicarle con más
intensidad. Lo que nos impulsará con más fuerza, será oír
a un mundo a nuestro
alrededor clamar: “¿Dónde está vuestro Dios?” Los paganos
se burlan y blasfeman,
y ¿quién les demostrará que hay una realidad espiritual?
Solamente podremos
mostrarla si la hemos experimentado personalmente.
¿Has hablado
alguna vez con tu alma y la has animado a esperar en Dios? No
dejes que las dudas que entran en la mente y el mal humor
que te sobrecoge
repentinamente, puedan turbarte. Dios te aliviará y serás
llevado a experimentar
Su presencia y ver Su rostro. Estamos en la hora de la
esperanza. Tu espíritu
probará el agua de vida y volverás a alabarle otra vez.
25 de Mayo Salmo 43
1. Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa; líbrame de gente impía, y del
hombre
engañoso e inicuo.
2. Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado?
¿por
qué andaré enlutado por la
opresión del enemigo?
3. Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; me conducirán a tu santo
monte,
Y a tus moradas.
4. Entraré al altar de Dios, al Dios de mi alegría y de mi gozo; y te
alabaré con
arpa, oh Dios, Dios mío.
5. ¿Por qué te abates, oh alma mía y por qué te turbas dentro de mí? Espera
en Dios; porque aún he de
alabarle, salvación mía y Dios mío.
David manifiesta
de nuevo en este Salmo que no tiene donde ir, sino a Dios.
Él es su fuerza. El mejor lugar para hacer preguntas es
la presencia de Dios, pero
ahí tenemos que ser muy honestos. ¿Por qué ha tenido
tanta opresión y por qué
parece que no encuentra alivio? Él expone su queja con
reverencia delante del
Señor. No quiere caer en la trampa de recurrir a lo que
es injusto y engañoso para
librarse de su situación. Ruega a Dios que permanezca a
su lado en contra de sus
enemigos.
La verdad viene
acompañada de la luz para disipar las tinieblas que ciegan a
los hombres y les detienen en el engaño. La luz nos da
libertad. Es cierto que nos
hace exclamar: “¡Ay de mí!”, y el egoísmo muere, pero
después de esto vendrán
las alabanzas y el gozo de la resurrección a una vida más
provechosa. Si el pueblo
de Dios se dejara guiar solamente por ella, sería
alumbrado por revelación divina,
pudiendo experimentar una tremenda liberación en sus
vidas en cuanto al pecado.
La luz y la verdad nos guían a la santidad en la
presencia de Dios.
David manda esperar
en Dios a su alma oprimida. Sus dilemas le arruinarían
si no fuera por la esperanza. Para él, su Dios es muy
personal y sabe que está
involucrado íntimamente en sus asuntos. Él sabe que la
gloria libertadora está
por delante.
26 de Mayo Salmo 44:1-3
1. Oh Dios, con nuestros oídos hemos oído, nuestros padres nos han contado,
la obra que hiciste en sus días,
en los tiempos antiguos.
2. Tú con tu mano echaste las naciones, y los plantaste a ellos; afligiste
a los
pueblos, y los arrojaste.
3. Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, ni su brazo los
libró; sino
tu diestra, y tu brazo, y la luz
de tu rostro, porque te complaciste en ellos.
Aquí tenemos una
oración, la cual debe ser contemplada por los sedientos de
avivamiento. Hemos leído libros y escuchado historias
acerca del avivamiento.
Son un legado que nuestros antepasados espirituales nos
dejaron y que todos los
verdaderos hijos de Dios devoran con gusto. En ellos se
observa como las fuerzas
de justicia se adelantaron y las obras de las tinieblas
retrocedieron, cuando hombres
y mujeres prevalecieron en la oración. Hombres fuertes y
malos temblaron ante
la espada de la palabra y cayeron, levantando entonces la
bandera blanca en señal
de rendición. El temor de Dios estaba en las calles y
sobre las casas de la gente
incrédula.
Lo que causó
estos movimientos no fue la fuerza de hombres capacitados y
preparados con el mejor equipaje. Cada persona que busca
el avivamiento reconoce
que Dios es todo lo que necesita; ha sido víctima de la
desilusión por las maneras
y métodos humanos, y ahora tiene una sola esperanza y una
sola meta. Ha decidido
dejar los experimentos y sólo le resta un recurso; si
Dios no es quien mueve, él
no tiene a quien recurrir. Su alma está dirigida hacia
Dios y va a esperar hasta
que Él rompa los cielos y descienda; si no, morirá
esperando sobre sus rodillas.
Sabe que solamente Dios dio la victoria a los antepasados
y solamente Él puede
ganar la batalla ahora. Ellos hallaron gracia ante los
ojos del Señor, y Él les apoyó.
El buscador moderno tiene que estar firme y convencido de
que todo lo demás
es vanidad y no llevará fruto eterno. La mano, el brazo y
el rostro del Señor, son
todo lo que necesitamos, de lo contrario sufriremos la
derrota.
27 de Mayo Salmo 44:4-16
4. Tú, Oh Dios, eres mi rey; manda salvación a Jacob.
5. Por medio de ti sacudiremos a nuestros enemigos; en tu nombre hollaremos
a nuestros adversarios.
6. Porque no confiaré en mi arco, ni mi espada me salvará;
7. Pues tú nos has guardado de nuestros enemigos, y has avergonzado a los
que
nos aborrecían.
8. En Dios nos gloriaremos todo el tiempo, y para siempre alabaremos tu
nombre. Selah
9. Pero nos has desechado, y nos has hecho avergonzar; y no sales con
nuestros
ejércitos.
10. Nos hiciste retroceder delante del enemigo, y nos saquean para sí los
que nos
aborrecen.
11. Nos entregas como ovejas al matadero, y nos has esparcido entre las
naciones.
12. Has vendido a tu pueblo de balde; no exigiste ningún precio.
13. Nos pones por afrenta de nuestros vecinos, por escarnio y por burla de
los que
nos rodean.
14. Nos pusiste por proverbio entre las naciones; todos al vernos menean la
cabeza.
15. Cada día mi vergüenza está delante de mí, y la confusión de mi rostro
me cubre,
16. Por la voz del que me vitupera y deshonra, por razón del enemigo y del
vengativo.
El buscador de
Dios en tiempos modernos tiene que estar de acuerdo con el
salmista. En primer lugar, Dios tiene que ser su Rey.
Mientras el hombre siga
reinando, Dios no mandará nada del cielo. En segundo
lugar, tiene que tener un
corazón expectante (v. 5). Puede dudar como Tomás, pero
cuando reconoce
que el Señor verdaderamente se interesa de manera
personal en él, debe exclamar:
“¡Mi Señor y mi Dios!” En tercer lugar,
tiene que dejar de confiar en lo que tiene
a su disposición. Y por último, la gloria, la alabanza y
la actitud del corazón,
tienen que ser dirigidas al cielo. Los deseos personales
tienen que morir ante
un ardiente celo de honrar Su nombre.
Por las vidas de
José, Daniel, Pablo y, en general, por lo que podemos ver en
toda la Biblia, ningún celo por Dios es encendido en el
corazón de una persona,
sin que Dios permita que este celo sea puesto a prueba.
Cuando esto sucede, miles
de personas se desaniman y dejan de seguir adelante. En
lugar de esperar la
victoria, sienten que han sido desechados y expuestos a
la vergüenza. Les parece
que ya no hay razón para buscar el reino de Dios. Los
incrédulos aprovecharán
esta oportunidad para burlarse de su debilidad, pero esto
es normal y no debe
sorprendernos.
28 de Mayo Salmo 44:17-26
17. Todo esto nos ha venido, y no nos hemos olvidado de ti, y no hemos
faltado
a tu pacto.
18. No se ha vuelto atrás nuestro corazón, ni se han apartado de tus
caminos
nuestros pasos,
19. Para que nos quebrantases en el lugar de chacales, y nos cubrieses con
sombra
de muerte.
20. Si nos hubiésemos olvidado del nombre de nuestro Dios, o alzado
nuestras
manos a dios ajeno,
21. ¿No demandaría Dios esto? Porque él conoce los secretos del corazón.
22. Pero por causa de ti nos matan cada día; somos contados como ovejas
para
el matadero.
23. Despierta; ¿por qué duermes, Señor? Despierta, no te alejes para
siempre.
24. ¿Por qué escondes tu rostro, y te olvidas de nuestra aflicción, y de la
opresión
nuestra?
25. Porque nuestra alma está agobiada hasta el polvo, y nuestro cuerpo está
postrado hasta la tierra.
26. Levántate para ayudarnos, y redímenos por causa de tu misericordia.
En medio de una
prueba, el salmista experimentó lo que es llegar al límite
humano. Ésta fue una posición muy desagradable para él.
Fue imposible aceptarla
y acomodarse a ella, porque era vergonzosa y deshonrosa.
El pueblo de Dios
debe emitir un aroma dulce, no tolerando un ambiente
apestoso ni rindiéndose
ante una tormenta de injusticia. David no se olvidó de
Dios y su pacto, ni se
arrepintió en su corazón de caminar hacia Él. Había sido
quebrantado y las sombras
le cubrían, pero como dijo Pedro: “¿A quién iremos?” No hay alternativa para
el buscador sincero. Está consciente de la omnisciencia,
omnipresencia y
omnipotencia de Dios. No puede dar crédito a otra fuente,
sino que vive y ora
por Su causa. Un estado de desesperación evoca intercesiones
poderosas. David
exclamó: “¡Despierta!; ¿por qué duermes, Señor?”, pero
tal audacia no debe
usarse con presunción. Tiene que proceder de la
profundidad del corazón, de
acuerdo con el corazón de Dios, y si es así ¡cuidado!,
porque todo el cielo
responderá y este pobre planeta será sacudido de polo a
polo. Los Salmos son
inspirados por el Espíritu Santo y son Escrituras
poderosas. ¡Respíralos, escríbelos
en tu corazón y llévalos en tus labios!
29 de Mayo Salmo 45:1-7
1. Rebosa mi corazón palabra buena; dirijo al rey mi canto; mi lengua es
pluma
de escribiente muy ligero.
2. Eres el más hermoso de los hijos de los hombres; la gracia se derramó en
tus labios; por tanto, Dios te ha
bendecido para siempre.
3. Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente, con tu gloria y con tu
majestad.
4. En tu gloria sé prosperado; cabalga sobre palabra de verdad, de humildad
y
de justicia, y tu diestra te
enseñará cosas terribles.
5. Tus saetas agudas, con que caerán pueblos debajo de ti, penetrarán en el
corazón de los enemigos del rey.
6. Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; cetro de justicia es el
cetro de tu
reino.
7. Has amado la justicia y aborrecido la maldad; por tanto, te ungió Dios,
el
Dios tuyo, con óleo de alegría
más que a tus compañeros.
“El testimonio de Jesús es el
espíritu de la profecía”, y el espíritu de
Cristo se
manifiesta testificando por medio del salmista. Su
espíritu es conmovido, los
secretos eternos entran en él, y su boca se abre para
hablar de asuntos que jamás
el ojo ha visto ni el oído ha escuchado. Ha recibido una
revelación de Cristo, el
Rey. Lo que él ha visto es mucho más hermoso que un
simple hombre, y la gracia
derramada sobre Sus labios, es infinita. Su palabra, que
existió antes de la
fundación del mundo, nunca dejará de ser. Él es el más
imponente en gloria y
majestad, preparado para la batalla y semejante a lo
descrito en Apocalipsis 19,
que fue escrito cientos de años más tarde. Prospera por
causa de las siguientes
características de Su naturaleza: verdad, humildad y
justicia, sin las cuales nadie
puede prosperar en Cristo. Su mano derecha elabora hechos
asombrosos. Reinará,
demandando rendimiento o destrucción, hasta que cada
enemigo se sujete y cada
corazón rebelde sea penetrado por Su espada. Cada hombre
llegará a ser un
prisionero de guerra o una estadística mortal. Este Rey
tiene un trono eterno: “Lo
dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite”. Él ama la justicia y Su cetro
es de absoluta rectitud y justicia. Aborrece la iniquidad
y dirige todo el peso de
Su majestad en contra de ella. Por eso Dios, quien es justicia, le ha ungido y
aprobado para que sea sobre
todo por la eternidad. Él es Señor y Cristo.
30 de Mayo Salmo 45:8-15
8. Mirra, áloe y casia exhalan todos tus vestidos; desde palacios de marfil
te
recrean.
9. Hijas de reyes están entre tus ilustres; está la reina a tu diestra con
oro de Ofir.
10. Oye, hija, y mira, e inclina tu oído; olvida tu pueblo, y la casa de tu
padre;
11. Y deseará el rey tu hermosura; e inclínate a él, porque él es tu señor.
12. Y las hijas de Tiro vendrán con presentes; implorarán tu favor los
ricos del
pueblo.
13. Toda gloriosa es la hija del rey en su morada; de brocado de oro es su
vestido.
14. Con vestidos bordados será llevada al rey; vírgenes irán en pos de
ella,
compañeras suyas serán traídas a
ti.
15. Serán traídas con alegría y gozo; entrarán en el palacio del rey.
El Campeón eterno
y real viene de la batalla para recibir a Su novia y acudir a
la boda. El óleo de alegría fluye de Su persona y la
celebración está designada
completamente para Su placer. Sus vestidos le adornan y
emiten un aroma de los
más fragantes.
Están presentes
las hijas de reyes aliados y a Su derecha está Su novia, vestida
con el oro celestial más fino. Nada es fingido o falso.
El Salmo pronuncia las
condiciones y votos matrimoniales para que ella sea
reina. Tiene que obedecer
la voz de su Novio, abandonar las relaciones más queridas
del pasado y olvidarse
de ellas. Entonces, será objeto del favor del Rey; se
someterá a Su soberano
señorío y se dedicará a adorarle. Al aceptar los votos,
ella es honrada delante
de todos los presentes, y en una gloriosa procesión, como
una princesa acompañada
por sus sirvientas, se presenta delante del Rey. Hace su
entrada a los palacios de
felicidad eterna. Este Salmo es un anticipo de las
grandes bodas del Cordero,
cuando Su novia, la iglesia, se haya preparado.
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