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Lowell Brueckner

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El juez David Woodmancy

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David Woodmancy
     Lo que sigue pasó hace un par de meses…

     Un amigo de nuestro hijo, Steve, un juez jubilado, que vivía en Aniak, Alaska, viajó a Anchorage para ver el estado en el que se encontraba el cáncer que le había vuelto a reaparecer, pero los doctores vieron que no merecía la pena operar. Él era ateo, pero sus tres mejores amigos: Steve, Thane and Thad, son cristianos, y él les respetaba mucho.

     Viajó a Colorado para estar con su hermano y desde allí mantenía contacto con Steve por teléfono. Cuando le habló de su condición, los dos rompieron en lágrimas. Quería mucho a los niños. Un hijo de Thad, Dawson, le había dado una Biblia. Troy, el hijo de Steve y Karyn, oraba por él todos los días.

     Entonces recibimos este mensaje de Steve: “Dave dio su vida a Jesús ayer. Thane estaba con él cuando nos llamó a Thad y a mí para darnos las gracias por el papel que habíamos tomado para que llegara a esta decisión. ¡Qué experiencia!

     Él dijo que iba a estar esperando a Troy y a Dawson cuando fueran al cielo. Thad y yo vamos a Colorado esta noche. Parece que la condición física de Dave se degenera rápidamente. Tuvieron que llevarle al hospital una hora después de que hablara con nosotros. Thane dijo que Dave está hablando a todos los doctores y enfermeras, deseándoles la paz que ahora tiene él.”

     El siguiente vino de Karyn: “Ayer, con su mano en la mano de Steve, Dave se fue”. Dave Woodmancy, un ateo toda su vida, pero ahora creyente en Jesús, pasó al paraíso. ¡El amor ferviente cubre multitud de pecados!... por medio de la fe en la sangre de Cristo.

     Steve escribió cuando regresó a Alaska

Steve y Dave preparando leña para el invierno
: “Thad dijo: ‘Bueno, si los diez años que hemos estado en Aniak solamente fueron para el alma de Dave, valió la pena’. Cuando el doctor preguntó a Dave como estaba, respondió: ‘Tengo un problema. Tengo una paz que jamás he tenido, pero a la vez tengo estos amigos a quienes amo tanto, que me es difícil apartarme de ellos’.” Steve mostró unas fotos a Dave: “Thad también tenía muchas e hicimos un slideshow y mientras las mostrábamos, se oían de fondo las canciones Sublime Gracia  y Mis cadenas son rotas. Él sólo podía prestar atención a ratos, pero su familia quedó encantada; quizás era para ellos. También estaban contentos de que estuviéramos allí. Decían que Dave repetidamente miraba el reloj y preguntaba: ‘¿Cuándo llegan Thad y Steve?’
Thane dijo: ‘Sólo estaba esperándoos, y ahora se irá’.”



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